NUEVAS RESPUESTAS ANTE LA DIVERSIDAD

“...Por último fui atravesando distintos terrenos, primero el pasto, luego un camino de tierra hasta llegar a una subida con piedras.  Sentí deseos ya de detenerme y volver a calzarme pero decidí caminar descalza un poquito más.  Advertí que no todos los terrenos son iguales y no todas las personas son iguales.  Por tanto, no puedo entrar en todos de la misma manera.  Esta subida me exigía caminar aún más lentamente y cuanto más suavemente pisaba, el dolor de mis pies era menor.  Esto me decía: cuanto más difícil sea el terreno del interior de una persona, más suavidad y más cuidado debo tener para entrar. Después de este recorrido pude ver claramente que descalzarme es entrar sin prejuicios, atenta a la necesidad de una persona, sin esperar una respuesta determinada; es entrar sin interés, despojada de mí misma…” (“La semilla que crece” Lily Guita)

Mi pasión por la enseñanza me abrió puertas a un conocimiento nuevo de mí misma y despertó nuevas incógnitas. Comencé a interpretar el saber como una inmensa pileta de aguas cristalinas en donde invito diariamente a “Otros” a zambullirse.
Y es en este momento, donde deseo hacerme eco de las palabras de Emilia Ferreiro, cuando dice: “Meterse en la pileta es otra cosa... es entrar en un ambiente alfabetizador... es la introducción a la cultura escrita”(1).  

Esta imagen de “meterse”, “zambullirse”, es la que nos deja pensando en la importancia que tiene para nuestros chicos tener “esa pileta”, poder hacer uso de ella pero no solos. Tal vez algunos sepan flotar y se animen a hacerlo solos... habrá otros que correrán el riesgo de mojarse los pies no sin cierto temor... otros que nos necesiten mucho más a su lado para animarlos a mojarse un poquito... 

Y es en este sentido justamente donde no debemos olvidarnos del cómo ingresar al interior de ese “Otro”; ya que cuanto más difícil sea el terreno del interior de una persona, más suavidad y más cuidado se debe tener para entrar. 

Y es justamente esta diversidad la que me animó a buscar nuevas respuestas que me ayuden a seguir hundiéndome en esa pileta alfabetizadora que me siga brindando herramientas para seguir acompañando a muchos niños y adolescentes que necesiten que los ayude a aprender a nadar y conseguir flotar solos.
El desafío es grande y vale la pena “zambullirse” en esa pileta para aprender nuevas estrategias.

[1] Ferreiro, E, Revista El Monitor, Buenos Aires, julio 2000, pp. 18

María Gabriela Rojas
DNI 21.395.787
Participante del curso virtual EL MAESTRO INTEGRADOR 

_________________________________

CURSO VIRTUAL INICIO PERSONALIZADO

INSCRIPCIONES ABIERTAS

Consultar aquí temario, aranceles y detalles: EL MAESTRO INTEGRADOR

           Completar el FORMULARIO DE PRE-INSCRIPCION

Consultas: info@encuentrovirtualpsp.com.ar